Opciones para jugar a fútbol en Buenos Aires... miles.
Van desde las típicas canchas de barrio de suelo de cemento, especialmente diseñadas para romper rodillas hasta los campos donde una vez hubo hierba, y que ahora tienen tanto polvo que cuando el balón toca el suelo hay que mirar para otro lado... Hay mucha oferta.
Lo mejor es acercarse a una cancha y hablar con el capitán del equipo, darle tu teléfono y decirle que si alguna vez necesitan a uno para cerrar la convocatoria que te llamen. Hazlo en 10 canchas y tienes plaza fija para un par de días. Y nada como el fútbol para hacer amigos. Hay una lista que organiza una tal Lola que debe de ser española y que te avisa de los partidos y las fiestas que hay en la ciudad. Es para que los españoles que trabajan aquí hagan piña. Un sistema similar al de Chicago.
A mi el sitio que más me gusta para jugar es la Escuela de Fútbol Claudio Marangoni. Las canchas son de hierba artificial de gran calidad, tiene como 8 campos de fútbol-cinco y muy buen rollo. Todos los viernes a las cinco hay partido que te puedes apuntar por internet. También hay un grupo en facebook. Se hace un torneo de varios equipos y dura como dos horas. Son varios partidillos de 15 minutos. Hay un nivel alto. Cuesta 30 pesos, unos 5 euros.
Hay varios tipos standard de jugadores que suelen jugar en la Claudio:
Tipo 1 El australiano. Este suele ser un tipo que se ha apuntado el partido porque lo ha visto anunciado en el youth hostel. Es el único que sabe jugar al fútbol en su provincia y aprovecha ahora que para una semana en B.A. para practicar. Cuidado, suele repartir leña.
Tipo 2 El Argentino. El más habitual con diferencia. Suele ser un pibe de 15 a 25. Más parecido físicamente a Di María que a Higuaín. Juega que te cagas. Va con la remera del River o del Boca. Muy deportivo siempre. Tiene un punto flaco, le encanta regatear. Lo único que tienes que hacer es esperar que haga lo más difícil e ir para ese lado. Si tienes la suerte de que va en tu equipo te vas a divertir como nunca.
Tipo 3 El Europeo. Suele venir con los equipos ya hechos, los colegas erasmus de su universidad. Juegan ordenados, con el mismo arquero todo el partido. Ninguno destaca sobre el resto. No comenten errores y acaban ganando los partidos.
Tipo 4 El Inglés. Llega pensando que el juego lo ha inventado él y que va a dar clases a los locales. Acaba en una esquina cabeza abajo, manos en las rodillas respirando con dificultad.
Tipo 5 Americano. Es el más simpático. Las zapatillas son de skate y en vez de pantalón corto lleva unas bermudas. Si por él fuera jugaría con las Rayban puestas. Su novia está en la grada sacando fotos. Le ha seguido para que no se vaya con la hermana del tipo 2, que está con sus amigas riéndose y mirando al rubiales de California. Cuidado, a pesar de que no ha jugado nunca al fútbol si le haces un caño te puede perseguir y partirte la tibia. Sin mala intención, por supuesto. Ya he dicho que el tío era el más simpático.
En cuanto a las camisetas mucha gente me ha preguntado si hay más camisetas de River o de Boca y la sorpresa es que de lo que más hay es de la selección.
De la selección española.
Y no lo digo en broma.
